En 1954, aunque
empezaban a quedar atrás los años más duros de la posguerra, el nivel de vida
aún distaba mucho de acercarse a los países de nuestro entorno. España quedó
totalmente al margen del Plan Marshall con el que Estados Unidos colaboró en la reconstrucción
de una Europa destrozada por la guerra. En 1953 se habían dado los primeros
pasos en la apertura de las relaciones exteriores y así poder terminar con el
aislamiento al que fue sometido nuestro país. Fruto de ese empeño, fue el acercamiento a Estados Unidos. Eisenhower
y Franco llegaron a un acuerdo de instalación de bases militares conjuntas en el
estado español. Esta circunstancia propició que además de la ayuda militar,
llegara también ayuda humanitaria por parte de Estados Unidos, la cual se
materializó en el envío del “complemento
alimenticio” (leche en polvo,
mantequilla y queso) que fue repartido a
todos los niños sin excepción en los “Colegios
Nacionales”, desde 1955 a 1968, aproximadamente.
Para la distribución de
la “ayuda alimenticia americana” destinada a los escolares, se creó el Servicio
Escolar de Alimentación, el cual dispuso una red de distribución perfectamente
organizada. En cada localidad había un centro que distribuía al resto de colegios. Para servir a tal fin,
fue nombrado Delegado Local del S.E.A. en Arcos a don Carlos Burguillos,
director de la Escuela Graduada nº1 “El Pósito”. En el recorte adjunto,
firmado por el propio don Carlos y dirigido al director de la Escuela Graduada
nº2 “Ntra. Sra. de las Nieves” don Luis
Guerra Cadilla, se detallan los envases remitidos a dicho centro desde que
comenzó el servicio en enero de 1954.
El recuerdo de este
complemento alimenticio a buen seguro retrotraerá a los que vivieron aquella
época a su infancia por su fuerte
componente anecdótico y simbólico. De hecho, son varias las personas que al
visitar el colegio tras décadas sin hacerlo me han señalado “-En ese armario
guardaba don Luis Guerra la leche en
polvo”, refiriéndose al mueble empotrado que está ubicado en la actualmente
denominada Biblioteca Julio Mariscal,
el cual todavía conserva sus puertas originales.
El reparto de la leche
en polvo y mantequilla americana en los colegios forma parte de la historia de
la escuela española (aunque tenga poco
que ver con la didáctica o el ámbito educativo) y es fiel reflejo de una etapa,
afortunadamente, ya superada en nuestro país.
No hay comentarios:
Publicar un comentario